Crear música es un acto artístico, pero también es un acto legal. Si no proteges lo que creas, estás dejando la puerta abierta a que otros lo exploten, lo copien o se beneficien de tu trabajo sin darte crédito ni ingresos. Aquí tienes una guía clara y práctica para asegurarte de que tus canciones estén registradas y tus derechos, protegidos.
¿Qué son los derechos de autor?
Son el conjunto de derechos legales que obtiene automáticamente cualquier creador por el simple hecho de haber compuesto una obra original: una letra, una melodía, una base instrumental, etc.
Existen dos tipos clave:
- Derechos morales: te reconocen como autor/a de la obra. Nadie puede atribuírsela sin tu permiso.
- Derechos patrimoniales: te permiten ganar dinero con el uso, reproducción o sincronización de esa obra.
¿Por qué es importante registrarlos?
Porque aunque la autoría nace automáticamente al crear la obra, el registro es la prueba legal. En caso de plagio, uso sin permiso o disputas, el registro es tu respaldo ante cualquier entidad o tribunal.
¿Dónde se registran las canciones?
Depende del país, pero hay dos vías principales:
1. Registros oficiales de propiedad intelectual
- En España: Registro de la Propiedad Intelectual
- En México: INDAUTOR
- En Argentina: Dirección Nacional del Derecho de Autor
- En Colombia: Dirección Nacional de Derecho de Autor
- También puedes usar plataformas internacionales como Safe Creative o Copyright.gov (EE.UU.)
Este tipo de registro es legalmente vinculante y recomendable si quieres máxima protección.
2. Sociedades de gestión colectiva
Estas entidades, como SGAE (España), SACM (México), ASCAP/BMI (EE.UU.), permiten:
- Registrar tus obras como autor o compositor
- Cobrar regalías por su uso en conciertos, radios, televisión, plataformas, etc.
- Gestionar licencias de sincronización o comunicación pública
Registrarte como miembro y declarar tus obras te permite empezar a monetizar tu música a escala internacional.
¿Y si hay varios autores?
Si una canción se ha compuesto entre varias personas, se debe registrar indicando el porcentaje de autoría de cada uno. Este paso es clave para evitar conflictos futuros. Lo ideal es firmar un split sheet (hoja de reparto) en cuanto esté terminada la obra.
¿Qué pasa con los beats comprados o licencias?
Si usas un beat comprado en línea, asegúrate de que:
- Tienes una licencia válida (exclusive o lease)
- Puedes acreditar al productor según los términos
- Entiendes qué derechos estás adquiriendo (y cuáles no)
Muchas disputas nacen por usar instrumentales sin leer bien las condiciones.
Consejos prácticos
- Registra todas tus canciones antes de publicarlas
- Guarda los proyectos originales (DAW, notas, audios de demo) como respaldo
- Usa plataformas como Safe Creative si necesitas agilidad o coste cero
- Revisa contratos o acuerdos antes de firmar cualquier cesión de derechos
Conclusión
Proteger tu música es proteger tu carrera. No es un trámite aburrido: es la base legal que te permite crecer con seguridad, cobrar lo que te corresponde y defender lo que es tuyo. Si eres artista independiente, registrar tus obras no es una opción: es una obligación profesional.